Dicen los matemáticos que entre dos números hay infinitos números. Así, entre 1 y 2 está 1,5 ; 1,6951 ; o cualquier otro número que se me ocurra. Tan infinitos son los números de 1 a 2 como lo son de 1 hasta el 1.000.0000. Por lo tanto surge una pregunta relevante: ¿es más grande el infinito que hay entre 1 y 2 que el infinito que hay entre 1 y 1000? Según los matemáticos, efectivamente es así, pero a mí no me convence. Pues si ambos son infinitos, no puede haber uno más grande que el otro o dejarían de ser infinitos.
Pero no sólo en los números (esa cosa tan abstracta ¿existen? ¿donde?) ocurre que se multiplican los infinitos. Infinitos son también los momentos que transcurren en una hora, porque puede siempre dividir el tiempo. Infinitos son los espacios entre yo y un libro que leo, porque puedo siempre dividir el espacio. Infinitas son las sonrisas de una sonrisa y los sonidos de una canción; infinitos los dolores de un dolor, infinitas las calles de esa calle mojada, infinita la vida de mi vida.
Pero no sólo eso. Porque si el infinito es lo que se extiende en absoluto, lo que todo lo abarca y todo lo alcanza, entonces hay infinitos lugares entre yo y el libro que leo; aquí está el partenón de atenas y la superficie marciana, un paisaje de china, las manos de un niño, un pastor, los miles de relojes de suiza y las palmeras de Fiji. Y en el momento que me demoro en escribir esto están todos los momentos contenidos. Una letra "s" y ha caído el imperio romano, cuento hasta tres... y la vida de Jesús que pasa como un rayo, pestañeo y el big bang que hace nacer el universo. Todo se concentra y suma al infinito éste o aquel, no importa porque son todos infinitos. La vida se hace una, el cielo se hace tierra... ¿y Dios? ahí está, contemplando desde su infinito propio, que es quizás la suma de todos los infinitos del infinito.
lunes, 23 de junio de 2008
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2 comentarios:
"...Infinitas son las sonrisas de una sonrisa y los sonidos de una canción; infinitos los dolores de un dolor, infinitas las calles de esa calle mojada, infinita la vida de mi vida."
son tantos infinitos los que nos rodean y que no entedemos en nuestra finita vida que inventamos a un dios infinito (más de uno, y si los sumas obtienes lo mismo, ya que sumas infinitos) que abarcan todos esos espacios eternos e inexplicables...supongo
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